Dólares escasean oficialmente, disponibles en mercado paralelo
DIVISAS.- La escasez del dólar en el sistema financiero oficial y su auge en el mercado paralelo son síntomas de un desequilibrio fiscal profundo que necesita ser corregido mediante reformas macroeconómicas y una gestión fiscal responsable.
El economista e investigador Carlos Aranda, de la Fundación POPULI, en una entrevista exclusiva con El Mundo, analizó las causas y consecuencias de la escasez del dólar en el sistema financiero oficial, y su aparición en el mercado paralelo a un precio significativamente más alto.
Aranda explica las complejidades macroeconómicas que han llevado a esta situación y plantea posibles soluciones para corregir el desequilibrio fiscal que la ha generado.
LA ESCASEZ DEL DÓLAR: UNA PREGUNTA CLAVE
La pregunta “¿Dónde se han ido los dólares?” ha resonado en diversos sectores económicos y financieros de Bolivia en los últimos tiempos. Según Carlos Aranda, entender esta desaparición requiere analizar el contexto macroeconómico del país desde el año 2000, cuando empezaron a aparecer dos desequilibrios fundamentales: un déficit en la cuenta corriente y un déficit fiscal persistente.
DESEQUILIBRIO FISCAL Y SUS CONSECUENCIAS
Aranda dice que el déficit fiscal promedio en Bolivia ha sido del 7.8% del PIB en los últimos once años, muy por encima del promedio latinoamericano del 2.2%. Este alto déficit ha sido financiado principalmente con créditos directos del Banco Central al Tesoro General de la Nación, lo que ha provocado una disminución sistemática de las reservas internacionales. En 2014, las reservas eran de 15,700 millones de dólares, mientras que ahora son de apenas 1,700 millones, de los cuales solo 150 millones son divisas líquidas.
Dada la falta de reservas suficientes para defender el tipo de cambio, el Banco Central no ha podido intervenir eficazmente en el mercado cambiario, lo que ha llevado a la creación de un mercado paralelo del dólar. En este mercado, el dólar se cotiza a un precio mucho más alto que el oficial, reflejando la escasez y la alta demanda de divisas.
PROPUESTAS PARA SOLUCIONAR EL PROBLEMA
El investigador Carlos Aranda sugiere una serie de medidas a corto y largo plazo para corregir el desequilibrio fiscal y estabilizar la economía:
Entre las medidas a Corto Plazo plantea corregir el Déficit Fiscal implementando un plan creíble para reducir el déficit fiscal año tras año, sustituyendo gradualmente los ingresos provenientes de hidrocarburos.
Otra medida que plantea es revisar la Planilla del Sector Público, evaluando la posibilidad de reducir el número de empleados públicos, actualmente suman más de 530,000.
También propone analizar las empresas deficitarias tomando la decisión, si es necesario, cerrar o vender las empresas públicas que generan pérdidas.
Otra medida es eliminar las barreras de exportación, facilitando las exportaciones con la eliminación de los cupos y promoviendo la inversión en tecnología agrícola e industrial.
Entre las medidas a mediano y largo plazo plantea atraer Inversión extranjera directa, para ello se debe garantizar seguridad jurídica y un entorno favorable para la inversión extranjera.
Igualmente plantea fomentar el sector exportador, desarrollando sectores como la agroindustria y el turismo, mejorando la infraestructura y los trámites migratorios para atraer más turistas.
Señala que también es menester acceder a Créditos Internacionales: estableciendo un compromiso serio y creíble para ordenar la economía y acceder a financiamiento internacional que pueda ayudar a estabilizar la situación fiscal.
La escasez del dólar en el sistema financiero oficial y su auge en el mercado paralelo son síntomas de un desequilibrio fiscal profundo que necesita ser corregido mediante reformas macroeconómicas y una gestión fiscal responsable. Carlos Aranda pone de relieve la importancia de adoptar medidas y la necesidad de un compromiso serio por parte del sector público para superar la crisis actual y estabilizar la economía boliviana.