Arda Güler puso dos exigencias para marcharse al Real Madrid

“Como he dicho antes, aquí me han asegurado que voy a jugar y se acabó. Salir cedido no está en mis planes». Era la cuarta vez que se lo preguntaban en menos de tres minutos, así que zanjó con ese latigazo el asunto de dónde jugará la próxima temporada: «Y se acabó». Ya sabemos algo más de él. Arda Güler tiene 18 años, tiene una zurda endiablada y tiene carácter.

También tiene razón. Va a ser futbolista de la primera plantilla del Real Madrid a todos los efectos, por si a algún periodista todavía le quedan ganas de volvérselo a preguntar. A Ancelotti le llamaron hace unos pocos días desde Valdebebas para explicarle que existía la posibilidad de fichar de forma inminente a uno de los mediapuntas más prometedores.

El jugador y su familia habían tomado la decisión de emprender una nueva etapa lejos de Turquía y ponían dos condiciones: no quedarse en el Fenerbahce para jugar cedido una temporada más, como valoró inicialmente el Madrid y también propuso el Barcelona (para así poder afrontar la parte principal del pago al año siguiente), y formar parte de la primera plantilla en el equipo que le fichara.