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Bolivia cae ante Brasil con gol de vestuario de Endrick

DERROTA.- La joya de 17 años del Real Madrid, Endrick inauguró el marcador a los 4’ del partido, tras un error en la defensa. El delantero brasileño ganó en velocidad a la zaga defensiva. Sin embargo, la Verde logró pararse mejor durante el encuentro.

Con un gol de vestuario, Bolivia cayó por la mínima diferencia (0-1) ante Brasil en el Pre-Olímpico Sub 23 disputado en Venezuela. El único gol de la Canarinha llegó a los 4’ por parte de la joya de 17 años Endrick, tras una mala salida de la defensa nacional.

La Verde, dirigida por Antonio Carlos Zago sufrió algunos embates por parte de la Verdeamarelha que; sin embargo, aunque intentó dominar el partido, no pudo demostrar su mejor juego.

Endrick a los 4’ del partido inauguró el marcador, tras un error en la defensa. El delantero brasileño ganó en velocidad a la zaga defensiva.

Bolivia intentó mantener el juego, lejos de su arco. Tras varios intentos, los delanteros de la verde llegaban sólo hasta los tres cuartos de cancha, mas no lograban realizar mayores afecciones a la zaga de Brasil.

La Canarinha, entre tanto, apostó a las salidas de contragolpe, con cambio de ritmos, que acabaron jugando malas pasadas a la selección nacional, que trató de llegar también con remates de larga distancia de parte de Gabriel Villamil, quien ya marcó por esta vía en el partido frente a Venezuela.

Al inciio de la segunda mitad, a los 49’, un remate de Marquinhos dio en el palo derecho del arco defendido por Adorno.

En la segunda mitad pudieron caer dos goles más de parte de Brasil; sin embargo, ambos fueron marcados en posición fuera de juego. El ingreso de Jeyson Chura y Miguel Villarroel logró paliar un poco los embates de Brasil y permitió a la Bolivia jugar mejor por las bandas e incluso tener mejor llegada al arco defendido por Mycael.

A pocos minutos del final del partido, Antonio Carlos Zago fue expulsado del campo de juego, dejando en su reemplazo a Pablo Daniel Escobar, para los últimos minutos del encuentro.

Fuente Paulo Lizárraga A.