Carpinteros y ebanistas piden acciones contra el contrabando
CONTRABANDO.- Cerca de 25 mil trabajadores carpinteros y ebanistas, en todo el país, enfrentan una situación crítica por la competencia desleal del contrabando. Piden acciones concretas al gobierno para proteger el patrimonio artesanal
En un congreso celebrado en Sucre los días 24 y 25 de febrero, representantes del sector de la carpintería y ebanistería de Bolivia se reunieron para abordar los desafíos que enfrenta su industria.
Impactados por la crisis económica, la falta de respaldo estatal y, especialmente, el flagelo del contrabando, los carpinteros y ebanistas emitieron un enérgico llamado a la acción para revitalizar su gremio y proteger sus medios de vida.
PIDEN FRENAR EL CONTRABANDO DE MUEBLES
Entre las propuestas presentadas destaca la urgencia de frenar el contrabando de muebles de baja calidad provenientes de Asia, una práctica que ha minado la competitividad de los artesanos locales. Para contrarrestar esta problemática, se urge la implementación de aranceles de importación que nivelen las condiciones para los productores bolivianos.
Asimismo, se enfatiza la importancia de controlar la exportación de madera sin procesar, promoviendo en su lugar la transformación local de la materia prima con valor agregado. Esta medida no solo fortalecería la industria nacional, sino que también contribuiría a la preservación de los recursos forestales del país, manifiestan las conclusiones.
Además, se demanda una mejora sustancial en las condiciones laborales y de salud de los trabajadores del sector. Se solicita un seguro de salud para carpinteros y sus familias, dado su constante contacto con químicos y el polvo de madera.
SOLICITAN PROMOVER EL CONSUMO DE LA PRODUCCIÓN NACIONAL
En términos de promoción del consumo interno, se insta a los distintos niveles de gobierno a fomentar la adquisición de muebles fabricados en Bolivia, impulsando así el mercado local y generando empleo en el país.
Wilfredo Barrios, ejecutivo de la Confederación Nacional de Carpinteros y Ebanistas de Bolivia, expresó su preocupación por la situación, señalando que «la madera sale de contrabando a países vecinos, Europa y Asia, y luego los muebles vuelven a ingresar a Bolivia del mismo modo, dejándonos con las manos vacías y sin fuentes de trabajo». Barrios hizo un llamado a la conciencia, destacando el rol de los carpinteros y ebanistas en la sociedad boliviana.
NO SE VALORA LA MANO DE OBRA ARTESANAL
La crisis ha impactado severamente al sector, como lo testimonian dirigentes locales como Armando Condarco de Cochabamba y Félix Paredes de El Alto, quienes lamentan la falta de consideración hacia la mano de obra artesanal y la escasez de materia prima de calidad.
Con cerca de 25 mil trabajadores en todo el país, los carpinteros y ebanistas enfrentan un panorama crítico. Sin embargo, con propuestas concretas y un llamado unificado a la acción, buscan revivir su industria y proteger su invaluable patrimonio artesanal.