Detención preventiva para 8 personas en caso de ciberextorsión
AUDIENCIA. La justicia dispuso detención preventiva por 180 días en la cárcel de Palmasola, para 8 de las 10 persona implicadas en el caso de ciberextorsión, mientras que 2 recibieron medidas sustitutivas. Dos de los imputados enfrentan cargos de enriquecimiento ilícito de particulares con afectación a Estado.
En audiencia de medidas cautelares desarrollada en el Palacio de Justicia la tarde de ayer, la justicia determinó que ocho de las 10 personas involucradas en el caso de ciberextorsión que investiga la fiscalía y policía en Santa Cruz fueron enviadas con detención preventiva por 180 días a cumplir en la cárcel de Palmasola. Dos investigados recibieron medidas sustitutivas.
Según la Policía, el ciudadano asiático es señalado como el cabecilla de la organización que, de acuerdo a las investigaciones, operaba desde oficinas que estaban en un edificio ubicado en la avenida Busch y segundo anillo de la capital cruceña desde donde hacían extorsiones a víctimas que estaban, principalmente, en el extranjero.
El ciudadano chino junto a otro de los imputados enfrentan cargos de enriquecimiento ilícito de particulares con afectación a Estado. Sin embargo, el abogado Sebastián Paz, defensor del asiático, la Fiscalía no pudo demostrar en qué forma esta persona se favoreció con enriquecimiento ilícito, como lo indicaba la imputación y que “se quedaron callados” cuando se les hacían esos cuestionamientos.
Para la Policía, esta es una organización criminal conformada por ciudadanos nacionales y extranjeros, un asiático y una ciudadana colombiana serían los presuntos accionistas de la empresa fachada que montaron en la capital cruceña, cada uno con un 50% de participación. Son sindicados de cometer estafas a víctimas de cuatro países: México, Perú, Colombia y Chile.
El pasado miércoles la Policía allanó un edificio céntrico donde las autoridades encontraron a más de cien personas. Según informes, en el lugar operaba una red de ciberextorsión, que migró de Perú.
La investigación indica que esta red de ciberextorsión prestaba dinero a altos intereses y que cuando cobraba amenazaba de muerte a las personas que recibieron dinero o a sus familiares.
El comandante policial Álvaro Álvarez indicó que los bolivianos que caían en los préstamos eran extorsionados con llamadas desde Ecuador. Este dinero era prestado con un interés de entre 30% al 40%.