En Elche ha pasado lo que tenía que pasar. Lo que todo el mundo esperaba. Un Barcelona letal y ordenado se ha impuesto en el campo del colista por 0 a 4, con un doblete de Lewandowski, que no marcaba en la Liga desde finales de febrero ante el Cádiz y que recupera la efectividad en el momento más oportuno, otro de Ansu Fati, que no veía puerta desde Ceuta y al que el gol le ha de servir para ganar confianza en el tramo final del campeonato, y un último de Ferran Torres, al que el gol también le va de maravilla.
La proximidad del decisivo clásico de Copa y la abismal distancia entre los dos equipos -55 puntos de diferencia- han permitido a Xavi tomarse la licencia de experimentar con su once ante el Elche. Además, le faltaban cinco titulares. Pese a que había dudas, no ha hecho descansar a Araujo, que ha formado pareja en el eje con Marcos Alonso y en los laterales ha puesto a Koundé por la derecha y ha recuperado para la causa a Jordi Alba.