El experto en minería, José Padilla, asegura que este proyecto es la “semilla” de la industrialización de Bolivia, ya que permitirá el desarrollo de diversas industrias que dependen del acero como materia prima. En principio, Bolivia avanza hacia la autosuficiencia en la producción de acero y sienta las bases para un futuro próspero en el ámbito industrial.
De acuerdo con el proyecto El Mutún, se espera producir a 450 dólares la tonelada, frente a los 700 dólares que llegan al país, lo que abarata los costos, especialmente para la industria de la construcción.
Padilla declaró que los tres ejes para el desarrollo industrial de un país son: el acero, la electricidad y el cemento. Bolivia cuenta con electricidad y cemento, y ahora se completará con el acero.
El Mutún permitirá el nacimiento de industrias, como la fabricación de partes y piezas para motores, lo que significará movimiento económico y empleo.
Si bien actualmente El Mutún tiene alrededor de 600 empleados, con el tiempo esa cifra fácilmente se puede triplicar.
Al generar empleo, requerirá más servicios y alimentos, lo que Santa Cruz producirá, generando más actividad económica, ya sea directa o indirectamente con este nuevo polo de desarrollo, explicó.