El PGE 2024 se sostendrá con más impuestos y créditos externos

REDUCCIÓN. El PGE 2024 sustenta su base de ingresos en el incremento del 10% de los impuestos y créditos externos, además de un marcado descenso en los recursos por hidrocarburos, afectando en las asignaciones a municipios y gobernaciones.

La Fundación Jubileo realizó un análisis minucioso del Presupuesto General del Estado 2024, el cual se sostiene en gran medida en el incremento de las recaudaciones tributarias y una disminución de la renta de hidrocarburo (IDH y regalías) que son menores a los obtenidos en la gestión 2006.

De acuerdo con las estimaciones del presupuesto, los ingresos por impuestos (que recauda el Nivel Central) registrarían un incremento de alrededor de 10 % con relación al presupuesto 2023; además de que es una estimación en términos nominales (sin considerar la inflación), en el transcurso de la gestión se observará si efectivamente se logra esa recaudación.

Contrario a las recaudaciones tributarias, el PGE 2024 tiene una reducción de los ingresos por hidrocarburos, provenientes del IDH y las regalías, que cayeron a partir del año 2015, para 2024 marcan nuevamente un valor mínimo de los últimos años, y muy por debajo de lo alcanzado en 2013 y 2014.

La caída de la renta por hidrocarburos se dio, en principio, por la disminución de los precios internacionales de hidrocarburos (desde finales de 2014), pero, los últimos años, la caída de la renta se debe a menores niveles de producción y exportación.

Siendo que el presupuesto 2024 fue elaborado con un precio estimado del barril de petróleo de 71 dólares, muy similar a la estimación del año 2023 de $us 71,90, se puede inferir que la disminución de esta renta en el presupuesto 2024 también es resultado de una menor producción (no por efecto del precio).

Ingresos de gobernaciones y municipios por transferencias

Con la disminución de los ingresos por renta de hidrocarburos, serán los gobiernos sub nacionales los afectados al ver reducido sus recursos provenientes de las transferencias por coparticipación de impuestos nacionales de IDH y regalías petroleras.

Entre 2014 y 2017, se dio una caída significativa se muestra claramente que la situación de los municipios y gobernaciones es menos favorable en comparación al periodo de bonanza, con ingresos bastante reducidos comparativamente. Para 2024, se tiene un monto similar al presupuestado en 2023, con un leve incremento en municipios y una leve disminución en gobernaciones.

El gasto público, los gastos corrientes, que son la mayor parte, continuarían incrementándose, con un aumento de 8% en 2024. Y la inversión, que ha caído desde 2017, se habría estabilizado en los últimos tres años, en alrededor de 2.650 millones de dólares, casi la mitad de lo registrado en 2016.

El presupuesto plantea un aumento de la inversión hasta $us 4.274 millones, monto difícil de alcanzar considerando la tendencia de los últimos años, con los limitados ingresos y el agotamiento de las reservas internacionales (RIN).

Un contexto con limitados ingresos y crecientes gastos corrientes resulta nuevamente en un déficit fiscal, de 7,8% del PIB para 2024, generando un déficit profundo y prolongado, de 11 años, lo que conlleva a continuar con el crecimiento de la deuda pública.

El crecimiento de la deuda, sumado al agotamiento de las reservas internacionales, muestra un panorama complejo en términos de la sostenibilidad del endeudamiento, y el riesgo de caer en situación de default (impago).

Fuente Patricia Canido