Marisabel Moirenda Urape, maestra de 28 años, fue encontrada sin vida la jornada del miércoles en un barrio alejado del municipio de Ascensión de Guarayos, Santa Cruz, presentaba signos de violencia.
Según reveló Jovita Iraipi, directora de la unidad educativa donde trabajaba la víctima, la educadora daba clases de gastronomía y actualmente se encontraba colaborando con la preparación de alimentos para los bomberos y voluntarios que combaten los incendios forestales.
“Esta maestra estaba en estos días colaborando con cocinar para los bomberos voluntarios, ya que nuestro municipio está sufriendo ese desastre ambiental que es lo que es la densa humareda por los grandes quemas que hay en estos días”, dijo Iraipi.
El cuerpo de Marisabel fue encontrado por unos niños quienes transitaban por el barrio San Gregorio, sus restos presentaban una herida a la altura del cuello y estaba arrojada a un lado de su motocicleta.
Marisabel era una joven maestra, desde hace seis años impartía sus conocimientos a los estudiantes de una unidad educativa de convenio de este municipio, era soltera y vivía con sus padres, quienes ahora en medio del dolor, se trasladaron a la capital cruceña para buscar el cuerpo de su hija que fue traído para que le realicen una autopsia.