El exministro de la Presidencia durante el arranque del régimen transitorio de la expresidenta Jeanine Áñez no volverá al país por temor a ser procesado en el caso Golpe de Estado I por el que su ex correligionario, Luis Fernando Camacho -gobernador-cruceño- se encuentra recluido.
La decisión la hizo conocer el propio Justiniano quien está en el trámite de su asilo político en Estados Unidos.
“En Bolivia no existe un estado de derecho, sino una persecución política ya que el MAS (partido en función de Gobierno) persigue políticamente a sus adversarios”, afirmó.
En comunicación desde Estados Unidos, donde actualmente se encuentra, insistió en que lo que quiere el Gobierno es encarcelar a todos los que no piensan igual a ellos porque, en su criterio, “todos sabemos que el Gobierno influye en la justicia”.
“Por ello decidí no volver a Bolivia. En este momento estoy en Estados Unidos, aunque todavía no he presentado mi solicitud de asilo, todavía estoy cumpliendo algunos requisitos, estoy analizando la posibilidad de presentarlo o no, todavía eso no es algo plenamente decidido, si bien es cierto que ya han empezado los trámites, no han concluido, por lo tanto, todavía eso está sujeto a una decisión final”, explicó. Se declaró “perseguido político”. Justiniano estuvo en Perú y luego en Brasil, país al que visitó por “problemas de salud”.