Falta de diésel generará muchas pérdidas y una crisis alimentaria
RIESGO.- La falta de provisión de diésel pone en riesgo la seguridad alimentaria en Bolivia, generando el desabastecimiento de proteína animal en el mercado interno y comprometiendo la exportación de derivados de soya.
El economista Luis Alberto Alpire, exdirector de Desarrollo Productivo de la Gobernación de Santa Cruz, expresó su preocupación por la crítica situación que atraviesa el sector productivo en la región, calificando la gestión actual como “desastrosa” en términos de resultados.
La campaña de verano 2023-2024 ha registrado una pérdida significativa en la producción de soya, con un saldo de 800 mil toneladas (TN) menos de lo esperado. En el caso de la campaña de invierno, la cual aún no ha concluido, todavía faltan por cosechar 400 mil hectáreas en el norte integrado de Santa Cruz, lo que representa una caída total de 1.5 millones de TN en cultivos como girasol, trigo, sorgo, maíz y chía. Estas pérdidas equivalen a un valor de mercado aproximado de 600 millones de dólares.
INCENDIOS FORESTALES SIN PRECEDENTES
A los problemas de producción agrícola se suma el impacto devastador de los incendios forestales que afectaron a alrededor de 9 millones de hectáreas, es decir, el 24% del territorio departamental de Santa Cruz. Estos incendios consumieron tanto bosques (61%) como pastizales y cultivos agrícolas (39%), estableciendo un récord histórico alarmante.
Alpire explicó que el fenómeno climático El Niño, presente desde julio de 2023 hasta marzo de 2024, generó condiciones adversas para la producción agrícola, con altas temperaturas y periodos prolongados de sequía. Aunque hubo lluvias en otoño, estas no fueron suficientes, y los frentes fríos y vientos intensos contribuyeron a evaporar la poca humedad del suelo, lo que exacerbó las condiciones de sequía e incendios, especialmente en la Chiquitania desde junio de este año.
POSIBILIDADES DE RECUPERACIÓN Y NECESIDADES URGENTES
A pesar del panorama desalentador, Alpire mencionó que las lluvias recientes han mejorado las condiciones del suelo, lo que permite la siembra de hasta 1.5 millones de hectáreas de soya, maíz y sorgo antes del 31 de diciembre. Sin embargo, el sector depende de que el Gobierno Nacional suministre diésel prioritariamente, lo cual es crucial para la cosecha de 400 mil hectáreas en el norte integrado, que proveen granos esenciales para la producción de alimentos básicos como carne, leche y huevo.
UN LLAMADO A GARANTIZAR LA SEGURIDAD ALIMENTARIA
Si el Gobierno Nacional no asegura la provisión de diésel, la seguridad alimentaria del país podría estar seriamente comprometida. Esto afectaría tanto el mercado interno de alimentos como el suministro de productos derivados de la soya, como el aceite y la torta de soya, para exportación.