Guatemala decreta emergencia sanitaria por gusano barrenador
MEDIDA. Guatemala decretó una emergencia de sanidad animal por el gusano barrenador tras detectar un ternero infectado, el primer caso en tres décadas en el país, informó el ministerio de Agricultura. Este foco «representa una amenaza para la ganadería nacional.
Guatemala decretó ayer una emergencia de sanidad animal por el gusano barrenador tras detectar un ternero infectado, el primer caso en tres décadas en el país, informó el ministerio de Agricultura.
Este foco «representa una amenaza para la ganadería nacional, así como para todos los animales de sangre caliente del país», dijo el ministro de Agricultura, Ganadería y Alimentación, Maynor Estrada, quien también señaló un riesgo para la población guatemalteca.
«Tomamos la decisión de declarar el estado de emergencia de sanidad animal en todo el territorio nacional, el cual está vigente desde hoy», añadió en rueda de prensa.
El gusano barrenador suele afectar a vacunos, ovejas y cabras, pero también humanos y cualquier animal de sangre caliente son susceptibles de contagiarse. Dos personas han muerto en Costa Rica este año por esta infección.
El ministro explicó que con el estado de emergencia se fortalecen las medidas para proteger al ganado y se crea una comisión interinstitucional que coordinará las acciones para evitar la propagación del foco.
Indicó que Guatemala se encontraba libre desde 1994 del gusano barrenador, una larva que las moscas Cochliomyia hominivorax depositan en heridas o mucosas de animales.
«En las últimas semanas hemos sido notificados que las naciones vecinas de Panamá, Costa Rica, Nicaragua y Honduras reportaron a la Organización Mundial de Sanidad Animal que tienen brotes del gusano y hoy lamentablemente nos sumamos a este reporte porque tenemos un caso confirmado», señaló Estrada.
Además, serán reforzadas las inspecciones al ganado y a medios de transporte en puertos, aeropuertos y fronteras, agregó.
El ministro precisó que las larvas fueron detectadas en un ternero en el municipio de Los Amates, sobre el Caribe, unos 250 km al noreste de la capital guatemalteca, cerca de la frontera con Honduras.
Los síntomas en humanos pueden incluir dolor, prurito intenso, eritema cutáneo, nódulos cutáneos, herida que supura y presencia de una protuberancia dolorosa en la piel, según expertos.