Iglesia señala que no se puede construir una patria sobre el odio
PRONUNCIAMIENTO. Obispos del país hicieron un llamado a la reflexión sobre la situación del país. Señalan que no se puede vivir bajo violencia. Ofrecen mediar el diálogo entre autoridades.
Al concluirse la Asamblea Nacional de Obispos número 115, los representantes de la Conferencia Episcopal de Bolivia dieron un mensaje de unidad al país, pero principalmente exhortaron a los políticos a trabajar por las necesidades de la población y no por los intereses partidarios.
En su mensaje, afirmaron que no se puede construir una patria sobre la mentira, la violencia, el odio y la muerte, “Dios nos conduce a la libertad cuando el pueblo es fiel, viviendo en la fe, la esperanza, la verdad y la solidaridad”.
Asimismo, expresaron su profunda preocupación por la crisis ética que atraviesa el país, evidenciada en el deterioro de la convivencia y en los conflictos económicos, sociales y medioambientales que golpean a Bolivia y al mundo. Frente a estos males, los obispos llaman a reencontrar la compasión y la solidaridad para que cada acción esté motivada por el bienestar del prójimo y el bien común.
En esa línea, los obispos subrayan la misión de la Iglesia como portadora de esperanza, por lo que ante los desafíos actuales, indican que este jubileo es una oportunidad para renovar el compromiso de cada cristiano en transformar la realidad con un corazón limpio y generoso, confiando en la promesa de Cristo de que estará con todos.
Asimismo, destacan el papel fundamental de la juventud boliviana, en quienes ven un “bono demográfico” lleno de potencial para construir una Bolivia nueva, llena de esperanza y resiliencia. Finalmente, luego de la situación ocasionada por los bloqueos, los obispos de la Iglesia Católica se ofrecieron de mediadores para resolver los conflictos en Bolivia y entablar un diálogo que buscar soluciones, con la finalidad de lograr una unión y el bienestar de los bolivianos.