Las lluvias impulsan las siembras de cultivos
Las precipitaciones recientes, pronosticadas han sido oportunas, no sólo para extinguir el último incendio que persistía en el departamento, precisamente en el municipio de Roboré, sino para generar humedad para la campaña de verano.
Como también sirvió para aplacar la dura y prolongada sequía que sufrían los municipios de la provincia Cordillera, principalmente Cuevo y Boyuibe, donde no llovía significativamente, aproximadamente hace 6 meses, señaló el agropronosticador Luis Alberto Alpire.
Las precipitaciones registradas desde el miércoles pasado en un rango entre 30 a 60 mm, han aprovisionado de agua a los atajados para el ganado, y que propiciará el rebrote de las plantas para el ramoneo del hato bovino, y en definitiva retomará pronto la normalidad en su ciclo productivo, como recuperación de peso, regularidad en la parición.
Las lluvias que se dieron en todo el territorio departamental, por ende, en el este, en cantidad suficiente para garantizar la humedad, para dar inicio a la siembra del ciclo agrícola más importante, que comprende 1.214.000 Ha de soya más 160.000 Ha de maíz y sorgo, haciendo un total de 1.374.000 Ha, de superficie cultivada proyectada por Anapo en este 2023.