El analista agropecuario Luis Alberto Alpire señaló que la superficie proyectada del cultivo estrella de la campaña más importante del ciclo anual, la soya, se estimó en 1.214.000 hectáreas para la siembra óptima, es decir, desde el 15 de noviembre hasta el 31 de diciembre de 2023. Lamentablemente, la falta de lluvias evitó cumplir con la meta ideal para aprovechar la mejor ventana de siembra, que podría haber traído consigo excelentes rendimientos, condicionada también a que durante el ciclo vegetativo del cultivo de cuatro meses se disponga de precipitaciones entre 400 a 500 milímetros.
Es evidente que el fenómeno El Niño, sinónimo de altas temperaturas y períodos de sequías, conspiró contra la siembra óptima del grano de oro, incidiendo seguramente en no cumplir con el objetivo propuesto de alcanzar la superficie prevista. Según un sondeo con los productores, se estima que el cultivo de la soya en la campaña de verano 2023-2024 no sobrepase el millón de hectáreas, gracias sobre todo a las últimas e intensas lluvias ocurridas en la primera semana de enero de este año.