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Magistrados son un “suprapoder” y están por encima de Luis Arce

ANALISTAS.- Expertos consideran que el mandatario quedó a la voluntad de los auto prorrogados, además que se han convertido un «suprapoder» que está por encima de los otros órganos del Estado.

Analistas políticos coinciden en que los magistrados auto prorrogados del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) son quienes gobiernan el país. Señalaron que el presidente Luis Arce quedó relegado y está bajo la voluntad de estos jueces.

Para los expertos la muestra de que Arce está sometido es el rechazo a sus propuestas de referendo. En ese entonces estaba encaminada las judiciales y esa negativa fue la advertencia de que de ellos dependía dar curso o frenar las pretensiones políticas del mandatario.

El analista político Rolando Schrupp señaló que se pasó del «poder político al poder judicial». Enfatizó que son los magistrados que gobiernan ahora el país y el jefe de Estado es sólo el rostro de un «aparente gobierno».

«Los jueces son los que están gobernando y no así Arce. Los que han anulado a Evo Morales son los magistrados. Arce es un operador, el poder ya no radica en él, está en los tribunales. Ahora es un gobierno casi aristocrático, porque son gente que no conocemos, pero que gobiernan», sostuvo.

El analista político Paúl Coca indicó que el TCP se ha convertido peligrosamente en un «suprapoder», que está por encima de los otros poderes del Estado. Añadió que quitan atribuciones a los otros órganos estatal y les dicta qué hacer, de acuerdo a los que les conviene.

«Hay algo de fondo, los auto prorrogados deben su mandato a Evo Morales, a quien anularon, sobrevivieron al gobierno transitorio y por el momento están con Arce. No hay nada que impida que le den la espalda a Arce cuando así les convenga a los auto prorrogados. Se ingresa a una etapa muy peligrosa para la democracia», observó.

Las acciones de los magistrados del TCP ponen en duda la realización de las elecciones presidenciales del 2025. Otro hecho es que el masismo generó esta desinstitucionalización y la cooptación del sistema judicial para su beneficio político y que en cualquier momento los magistrados pueden darse la vuelta para tener mayor poder, según explicaron los especialistas.