Piden desalojo de avasalladores que amenazan 70.000 hectáreas

AMENAZA . La Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo denuncia que continúan las amenazas de avasalladores en la zona del norte integrado. Algunos grupos delictivos se dan el lujo de sembrar y cosechar soya. Piden la aprehensión de los cabecillas de los avasalladores.

Los avasalladores siguen infundiendo temor a los productores del norte integrado, tanto que hasta se han dado el lujo de sembrar y cosechar en tierra ajena. La perspectiva de los avasalladores es tomar 70.000 hectáreas.

Según la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), los avasalladores amedrentan desde el año pasado a los propietarios de predios titulados y en plena producción agrícola.

A algunos productores les impidieron sembrar, mientras que en otros casos fueron más osados porque no solo que avasallaron, sino que sembraron y cosecharon soya en un área superior a las 100 hectáreas.

Los productores afectados tomaron acciones ante la justicia y denunciaron estos hechos delictivos. Como resultado, se han sido emitido órdenes de desapoderamiento y detención para los cabecillas identificados.

Se espera que la Policía y la Fiscalía cumplan con el mandamiento de aprehensión que fue emitido contra los implicados, quienes generan incertidumbre y temor entre productores que invierten de manera significativa en la producción de granos.

“Es fundamental recibir señales claras de que no se permitirán avasallamientos en propiedades tituladas, con el fin de asegurar la seguridad jurídica de las tierras productivas”, afirmó el gerente general de Anapo, Jaime Hernández.

El vocero de Anapo añadió que estos grupos delincuenciales circulan en moto con el rostro cubierto para no ser reconocidos.

Actualmente los productores están en la etapa de la siembra para la campaña de invierno. Varios optan por la soya.

No es la primera vez que se registran amenazas y avasallamientos. El Gobierno en reiteradas oportunidades ha señalado que no se permitirá más avasallamientos, pero no tiene el poder coercitivo para hacer cumplir su palabra.

Se han dado casos donde los avasalladores toman tierras ajenas solo para después revenderlas.

Source Ronald Pérez