Presidente reconoce la crisis, pero no presenta las soluciones
CRISIS.- El analista de la Fundación Jubileo, Julio Velásquez señaló la imposibilidad de sustituir los ingresos que genera el gas en Bolivia, que ascienden a aproximadamente 2.600 millones de dólares anuales, por eso la situación es más complicada.
El reconocido empresario boliviano Samuel Doria Medina expresó su preocupación ante la falta de respuestas por parte del presidente Luis Arce para superar la crisis económica que enfrenta el país. En sus declaraciones, Doria Medina lamentó que, si bien el presidente reconoce la escasez de fondos para realizar obras, no presenta soluciones concretas para abordar estos desafíos.
«Estamos frente a un desmoronamiento del modelo económico que se instaló en el país en 2006. Funcionaba bien cuando vendíamos nuestro gas, pero ahora ni siquiera hemos sido capaces de mantener la producción de gas», afirmó Doria Medina. El empresario destacó la falta de inversión en exploración y desarrollo del sector, lo que ha llevado a la actual crisis de hidrocarburos.
Por otro lado, el analista en hidrocarburos de la fundación Jubileo, Julio Velásquez también se pronunció sobre la situación económica del país, señalando que la crisis de hidrocarburos se arrastra desde hace 18 años debido a la falta de políticas en el sector. Velásquez destacó la importancia de reconocer la situación actual y subrayó que la reponer el gas es un proceso a largo plazo que requiere de inversiones significativas y planificación estratégica.
En este sentido, Velásquez destacó la imposibilidad de sustituir los ingresos que genera el gas en Bolivia, que ascienden a aproximadamente 2.600 millones de dólares anuales. «No ha habido ningún sector económico que haya generado ese monto», agregó.
Ante este panorama, tanto Doria Medina como Velásquez hacen un llamado a la acción urgente por parte del gobierno para implementar medidas efectivas que permitan superar la crisis económica y garantizar un futuro sostenible para el país. La falta de respuestas claras y soluciones concretas solo agrava la situación, por lo que es imperativo actuar de manera inmediata para proteger la economía boliviana y el bienestar de sus ciudadanos