DECARACIÓN. La expresidenta del Senado, dijo que Jeanine Áñez asumió el mando del Estado en un “simulacro de sesión” de la Asamblea Legislativa y que producto de eso se “desató la persecución en contra de dirigentes y exautoridades del MAS”.

La expresidenta de la Cámara de Senadores, Adriana Salvatierra, se presentó ayer a declarar a la Fiscalía en La Paz, donde ratificó la ilegalidad de la sucesión constitucional de Jeanine Áñez y negó que haya rechazado asumir la Presidencia del país a cambio de que su padre, Hugo Salvatierra, deje de ser procesado en el caso tractores.
“He recapitulado un conjunto de documentos en los que establezco de forma fehaciente que en nuestro país el 2019 se vivió un golpe de Estado que materializó que Jeanine Añez asuma en un simulacro de sesión de la Asamblea Legislativa, se posesiona ilegalmente como presidenta sin cumplir los procedimientos constitucionales”, afirmó la exlegisladora.
También negó que haya rehuido a la Presidencia del país a cambio de que se detenga el juicio de responsabilidades de su padre quien debe responder por la presunta ilegalidad en la licitación y adquisición de tractores en el primer gobierno de Evo Morales.
“Es absolutamente falso y lo voy a demostrar con documentación”, afirmó Salvatierra cuando se le interrogó si era evidente que no asumió el mando de la nación para evitar que sea procesado su padre por el caso tractores.
Añadió que acudió a declarar sobre lo que sabe y tiene conocimiento y que aportó con documentación al Ministerio Público.
“Quienes estamos seguros de ello no nos abstenemos a declarar y, por el contrario, acudimos de forma transparente a la justicia, confiados en que nuestras acciones contribuirán al acceso a la verdad histórica que tanto reclama el pueblo boliviano”, expresó en alusión a la postura que asumió el expresidente, Carlos Mesa, cuando se presentó ante la comisión de fiscales y se acogió al silencio constitucional.
“Creo que el pueblo boliviano merece conocer la verdad y quienes estamos seguros de ella no nos abstenemos de declarar y por el contrario acudimos de forma transparente a la justicia”, afirmó.
Según Salvatierra, en los documentos que entregó se prueban que Jeanine Áñez asumió el mando del Estado en un “simulacro de sesión” y que producto de eso se “desató la persecución en contra de los dirigentes y exautoridades del MAS”.