Sin una reforma constitucional no se profundizarán las autonomías
REFORMA. El abogado constitucionalista Juan Carlos Urenda asegura que al menos 15 artículos de la CPE se contraponen al enunciado de Bolivia es un Estado autonómico
El abogado constitucionalista Juan Carlos Urenda señaló que no se podrán profundizar las autonomías si no se modifican al menos 15 artículos de la Constitución Política del Estado. Aunque la Constitución reconoce a Bolivia como un Estado autonómico, existen normas que contradicen este principio.
La noche del pasado lunes 13 de noviembre, el presidente del Comité pro Santa Cruz, Fernando Larach, presentó un proyecto destinado a “liberar las autonomías secuestradas” y reconfigurar la relación de Santa Cruz con el Estado central.
En este contexto, el abogado Urenda indicó que el cabildo del año pasado estableció parámetros para rediseñar la relación de Santa Cruz con el Estado. El constitucionalista señaló que la Constitución Política del Estado (CPE) tiene aspectos positivos y negativos para el proceso autonómico, además de normas centralistas aprobadas posterior a la reforma constitucional.
Urenda expresó su preocupación sobre la viabilidad de profundizar las autonomías en Bolivia sin realizar modificaciones sustanciales en la Constitución Política del Estado. Destacó la necesidad imperante de abordar estas discrepancias constitucionales para lograr avances significativos en el proceso autonómico del país. Enfatizó que el primer diagnóstico revela la imposibilidad de avanzar sin modificar la constitución, argumentando que es fundamental abordar al menos 15 aspectos que presentan incongruencias en el marco legal actual.
“El cabildo abogó por abrir la constitución y las leyes, sin contravenir los principios constitucionales ni recurrir a una revolución. A pesar de otorgar autonomías institucionales, basadas en el estatuto cruceño del 2008, con la elección popular del gobernador y la Asamblea Legislativa, así como facultades normativas, la constitución también impuso restricciones significativas”, explicó.
El constitucionalista comparó la cantidad de competencias asignadas a Bolivia con la Constitución española, indicando que mientras esta última tiene 36 competencias a nivel central, la boliviana cuenta con 83. Según Urenda, esto refleja un desequilibrio en el reparto de competencias autonómicas.