Depués de cincos años, el líder del Movimiento al Socialismo (MAS), Evo Morales, vuelve a estar en su peor momento. La última vez que estuvo en declive fue en noviembre del 2019, cuando renunció a su cargo de presidente. Fuentes cercanas al evismos acusan a su entorno y a su cúpula.
En pasados días círculo un video de Morales molesto porque dirigentes le piden viáticos y pasajes para marchar y bloquear. «Acaso a Túpac Katari cuando cercaba con 50.000 (campesinos) La Paz le pedían viáticos, acaso le pedían logística», expresó.
El denominado «Estado Mayor del Pueblo» y el Pacto de Unidas evista realizaron un bloqueo de caminos que duró 24 días. Ello para anular los procesos que tiene en contra el jefe masista y garantizar su candidatura a las elecciones presidenciales del 2025.
Allegados al evismos informaron a El Mundo que días antes de la medida de presión tuvo una reunión con sus parlamentarios, exministro y dirigente. «Un grupo de diputados y senadores le dijeron al Evo que no bloquee por la situación del país, le dijeron que no iba a tener apoyo a nivel nacional», detalló un fuente, que pidió no ser identificada.
Esta fuente detalló que quienes insistieron en el bloqueo fueron sus «dirigentes que sólo obedecen» y «la cúpula que lo hizo caer en 2019». Este entorno son la exsenadora Adriana Salvatierra, los exministros Juan Ramón Quintana, Fernando Huanacuni, Javier Zavaleta, Teresa Morales, Carlos Romero, Gabriela Montaño y el exviceministro Nelson Cox.
«El Evo no escucha a todos, sólo a los que le mienten, le hacen creer cosas que no son, lo tiene encerrado en cuatro paredes. Esto mismos insistieron que vaya como candidato el 2019. En el Congreso de Montero dijeron que era el único que podía ganar, sino el MAS perdería, estos insistan más que el mismo Evo», rememoró la fuente.
Asimismo, indicó que sus sendadores y diputados por Cochabamba y algunos de La Paz y Potosí se suman a ese entorno. «Hay una rosca, cree que están en el poder y pueden operar sin problemas, hasta se inventan que tienen el apoyo de sectores», complementó.
El bloqueo evista no tuvo apoyo a nivel nacional, el epicentro fue el departamento de cochabambino. Esta medida sólo derivó en un rechazo a la imagen de Morales del 92%, según encuestas, por el dañó económico que ocasionó y perjuicio a las familias bolivianas.
Desde hace aproximadamente más de un mes el líder masista no sale de su bastión Villa Tunari. Ayer aprehendieron a sus dirigentes Humberto Claros y Ramiro Cucho. La Policía también está en la búsqueda de exmintro Quintana, la madruga de hoy allanaron su domicilio.
El evismo perdió fuerza con su bloqueo. Entre tanto, el gobierno de Luis Arce aprovecha esta debilidad; primero rompió el diálogo con los allegados a Morales, ahora va por la detención de sus dirigentes que incitaron a obstruir vías.