Corpus Christi: Iglesia insta a ser “sembradores de justicia”

MISA. En la celebración de Corpus Christi, el arzobispo de Santa Cruz, monseñor René Leigue lamentó que hay varias personas viviendo en injusticia en el país. Señaló que a algunos se les ha inventado juicios. Instó a ser sembradores de justicia y buscar la paz.

Miles de feligreses católicos celebraron ayer Corpus Christi, una festividad que recuerda la importancia del Cuerpo y la Sangre de Cristo en el sacramento de la comunión y la fe de las personas.

Este año la misa central se desarrolló en el atrio de la Catedral de la capital cruceña y estuvo presidida por el arzobispo de Santa Cruz, el monseñor René Leigue, quien en la oportunidad instó a que los ciudadanos sean sembradores de paz, como el lema de este año, ya que asegura que hay varias personas viviendo en injusticia en el país.

“¿Cuántas personas hay ahora sufriendo por injusticia?, ¿cuántas personas calumniadas?, ¿a cuántas personas le han inventado un juicio, por ahí?, ¿cuántas personas están presas, sin tener un juicio?, ¿a cuántas personas se las está investigando y hasta ahora se soluciona aquella investigación?, tanta injusticia que hay”, cuestionó Leigue.

De igual forma, señaló que si alguien cometió un error, es justo que pague por su error, pero de una manera también justa, ya que no se trata de hacerlo sufrir o a su familia o a la sociedad.

“Estamos viviendo momentos muy difíciles aquí en nuestro país, ¿qué hacer? es la pregunta que nos hacemos todos. ¿Qué hacemos?, ¿dónde vamos?, ¿a quién escuchamos?, ¿dónde nos dirigimos?, ¿a quién pedir justicia?.¿Quién no quiere vivir tranquilo por las calles? y hay tantos problemas también”, lamentó.

Por último, indicó que a veces se piensa que sacar algunas leyes calmará la violencia, pero que esa no es la solución, ya que al exigir paz, la sociedad debe preguntarse cómo está cada uno como persona.

PROCESIÓN Y CUERPO DE CRISTO

Al ser una celebración que conmemora el Cuerpo y la Sangre de Cristo, Leigue ratificó su importancia, ya que no solo es alimento corporal, sino alimento espiritual y por lo tanto debe ser fortalecido por la fe de cada persona.

Posterior a la Eucaristía, se realizó la tradicional procesión por las calles aledañas a la Plaza 24 de Septiembre, donde la concurrencia también fue multitudinaria.

Source Martha Gil