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La precariedad laboral amenaza la libertad de expresión en Bolivia

PRECARIEDAD.- Ocho de cada 10 periodistas viven en condiciones de precariedad extrema, afectando la calidad de vida de los periodistas, sino que también representa una amenaza directa a la libertad de expresión y, en última instancia, a la democracia en el país.

En Bolivia, la situación laboral de los periodistas enfrenta una crisis preocupante, según revela una investigación interna llevada a cabo por la Asociación Nacional de Periodistas, respaldada por profesionales de todo el país.

OCHO DE CADA 10 PERIODISTAS VIVEN EN PRECARIEDAD

El informe indica que ocho de cada diez comunicadores se encuentran viviendo en condiciones de extrema precariedad, con una ausencia significativa de beneficios laborales como bonos o seguridad social. La realidad laboral se ha tornado aún más desafiante, con empresas que contratan a los periodistas bajo modalidades por nota publicada, sin ofrecer estabilidad ni garantías a largo plazo.  En este contexto, la remuneración por trabajos periodísticos ha disminuido considerablemente, llegando incluso a pagarse tan solo 15 bolivianos por nota en algunas regiones, como en Santa Cruz, señaló Zulema Alanes, presidenta de la Asociación Nacional de Periodistas.

La falta de acceso a servicios de salud es otro aspecto alarmante, subrayado por la presidenta de la Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia. Esta precariedad laboral no solo afecta la calidad de vida de los periodistas, sino que también representa una amenaza directa a la libertad de expresión y, en última instancia, a la democracia en el país.

EN PELIGRO LA LIBERTA DE EXPRESIÓN

Según Zulema Alanes, los bajos salarios y las condiciones laborales desfavorables están esterilizando las formas de trabajo en el periodismo boliviano. Este fenómeno no solo atenta contra la integridad de los profesionales de la comunicación, sino que también limita la diversidad y la pluralidad de voces en el espacio público.

FECHAS PARA REFLEXIONAR

El 3 de mayo se celebra el Día Mundial de la Libertad de Prensa, proclamado en 1993 por la Asamblea General de las Naciones Unidas, siguiendo la recomendación de la Conferencia General de la UNESCO. La fecha coincide con el aniversario de la Declaración de Windhoek, donde los representantes de medios de comunicación africanos elaboraron un documento que recoge los principios de la libertad de prensa. Este derecho fundamental está consagrado en el artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

Este 2024, el Día Mundial de la Libertad de Prensa está dedicado a la importancia del periodismo y la libertad de expresión en el contexto de la actual crisis medioambiental en todo el mundo. La concienciación sobre todos los aspectos de las distintas crisis medioambientales y sus efectos es esencial para construir sociedades democráticas, y la labor periodística juega un papel fundamental para responder a esta crisis.

En el contexto de la triple crisis planetaria mundial -cambio climático, pérdida de biodiversidad y contaminación atmosférica-, las campañas de información errónea y de desinformación ponen en tela de juicio los conocimientos y los métodos de investigación científica.

Fuente Ivan Ramos-Sucre